Intenté pintar unas rosas directamente, con precisión, pero me dejé llevar por detallés..., encontré que me hundía, que no iba a ninguna parte; me había perdido; no podía recobrar mi primer impulso, la visión que me deslumbró, mi punto de partida. Espero que sea posible recobrarlo...
La presencia del modelo, del tema, es un estorbo para el pintor mientras pinta. El punto de partida es siempre una idea -la presencia del objeto durante el trabajo es una tentación-; el artista sufre el peligro de dejarse llevar por su visión directa, inmediata, olvidándose de su primer impulso... acaba aceptando lo fortuito, se pone a pintar las sombras que tiene delante o algún detalle que no le interesó al principio... Muy pocos pintores han sabido emplear directamente el modelo, y los que salieron con las suyas tenían sus métodos de autodefensa.
Pierre Bonnard
Entrevista con Angele Lamotte
1943
Cargando críticas...
Cargando vídeos...